Los ex beneficiarios del plan de inclusión social de jefes y jefas de hogar se autoconvocaron en la Perla del Oeste. Reclaman que se reconozca su estatus laboral, y se equiparen sus salarios a los $650 pesos que cobran los jefes y jefas que se desempañan en salud y educación. Llevaran sus reclamos a la Legislatura provincial, de no prosperar recurriran a la Justicia. La iniciativa promete traer cola, son aproximadamente 1200 en Chilecito, pero 20 mil en la provincia. En Chilecito los ex jefes y jefas de hogar que quedaron excluídos de las leyes que beneficiaron a sus pares que se desempeñan en salud y educación decidieron organizarse y plantear sus reclamos en forma colectiva y con asistencia legal. En la tarde del martes, explicaron que están juntando las firmas de los beneficiarios de planes sociales que aún continúan cobrando $150 pesos mensuales. Piensan iniciar un reclamo ante la Cámara de Diputados de la provincia, y de no prosperar llevaran el caso a la Justicia, manifestaron que “hay gran malestar y preocupación, porque desde el año 2002 venimos percibiendo el mismo sueldo. La realidad es que estos programas se cayeron y hoy nadie puede sobrevivir con $150 pesos mensuales. Necesitamos que se equipare nuestro salario a los $650 pesos que cobran los planes que trabajan en salud y educación”. También pidieron que la Ley provincial creada a instancias de la vicegobernadora Teresita Luna durante el año 2006, tenga cumplimiento efectivo pero abarcando a todos los jefes y jefas de hogar. Aquella ley ordenaba al Estado Provincial el paso a planta transitoria de todos los jefes y jefas de hogar que en ese momento trabajaban en salud, y según Teresita Luna, la medida iba a ir incluyendo progresivamente a todos los titulares de planes sociales. Sin embargo, no pasó ni lo uno, ni lo otro. Los jefes y jefas de Chilecito ahora piden que se cumpla esta ley, pero “sin discriminaciones”. Los interesados pueden informarse en el local 13 de la Galería Victoria, en Chilecito.
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